La Food and Drug Administration (FDA) de los Estados Unidos de Norteamérica ha comunicado que frente a las preocupaciones que surgen de los recientes informes que cuestionan la seguridad de los medicamentos de venta con y sin receta médica utilizados para el control del dolor durante el embarazo, ha procedido a la evaluación de los estudios de investigación publicados en la literatura médica. Como resultado de esta evaluación determinó que los estudios son muy limitados para realizar recomendaciones y que debido a esta incertidumbre, el uso de analgésicos durante el embarazo deberá ser considerado cuidadosamente.
El dolor intenso y persistente que no se trata de manera efectiva durante el embarazo puede causar depresión, ansiedad e hipertensión arterial en la madre. Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE), opioides y paracetamol pueden ayudar a tratar el dolor intenso y persistente. Sin embargo, es importante sopesar cuidadosamente los beneficios y riesgos del uso durante el embarazo, de estos medicamentos cuya condición de venta puede ser con y sin receta médica.
Los estudios publicados y revisados por la FDA reportan posibles riesgos asociados a los siguientes tres tipos de analgésicos utilizados durante el embarazo: Antinflamatorios no esteroideos (AINEs), opiáceos y paracetamol. Los AINEs de venta con receta médica (ibuprofeno, naproxeno, diclofenaco y celecoxib) se relacionan con riesgo de aborto involuntario en la primera mitad del embarazo. Los opiáceos, disponibles sólo con receta médica, se relacionan con riesgo de defectos congénitos en el cerebro, la columna vertebral o la médula espinal en los bebés nacidos de mujeres que tomaron estos productos durante el primer trimestre del embarazo. Los ejemplos de opioides incluyen la oxicodona, hidrocodona, hidromorfona, morfina y codeína.
El paracetamol en productos de venta con y sin receta médica, se relaciona con riesgo de trastorno de hiperactividad y déficit de atención en niños nacidos de mujeres que tomaron este medicamento en cualquier momento durante embarazo. El paracetamol es un analgésico y antipirético común que se encuentra en cientos de medicamentos, incluyendo los utilizados para resfriados, gripe, alergias y sueño. No obstante, la FDA informa que los estudios revisados presentan limitaciones en sus diseños; algunos con resultados contradictorios que impidieron establecer conclusiones fiables.
Como resultado, la FDA mantiene sus recomendaciones sobre el uso de los analgésicos durante el embarazo: “Las mujeres embarazadas siempre deben consultar con los profesionales de la salud antes de tomar cualquier medicamento. Las mujeres que toman medicamentos para el dolor y están pensando en quedar embarazadas también deben consultar con los profesionales de la salud para discutir los riesgos y beneficios de estos medicamentos. Los profesionales de la salud deben continuar siguiendo las recomendaciones en las fichas técnicas de los analgésicos al prescribirlos a pacientes embarazadas”.
Fuente:
U.S. Food and Drug Administration (FDA). FDA Drug Safety Communication: FDA has reviewed possible risks of pain medicine use during pregnancy. 09 January 2015 [citado 08 ene 2015].
Disponible en: http://www.fda.gov/Drugs/DrugSafety/ucm429117.htm