El Instituto ECRI de los Estados Unidos de América ha publicado su informe anual “Top 10 Heatlh Technology Hazards for 2018” en el que recoge los 10 principales riesgos de las tecnologías del ámbito sanitario que requieren más atención por parte de los profesionales de la salud para evitar las consecuencias de un mal uso en los pacientes.
El objetivo de este informe es identificar las fuentes potenciales de peligro y minimizar los problemas asociados al mal uso de dispositivos a través de protocolos para su correcta utilización y mantenimiento. De esta forma, tras un estudio exhaustivo de los riesgos que rodean a la tecnología sanitaria, esta edición del Top 10 Heatlh Technology Hazards para el año 2018 ha valorado como principal riesgo los siguientes:
- Ransomware (software “virus” malicioso) y otras amenazas de seguridad cibernética para la prestación de servicios de salud pueden poner en peligro a los pacientes.
- Las fallas en el reprocesamiento de endoscopios continúan exponiendo a los pacientes al riesgo de infección.
- Los colchones y cubiertas pueden ser infectados por fluidos corporales y contaminantes microbiológicos.
- Las alarmas perdidas (o no atendidas) pueden resultar de dispositivos y sistemas de notificación secundaria configurados inadecuadamente.
- La limpieza incorrecta puede causar malfuncionamiento del dispositivo, fallas en el equipo y potencial para daño o lesión del paciente.
- Los electrodos activos electroquirúrgicos sin tapizar pueden provocar quemaduras en el paciente.
- El uso inadecuado de herramientas de imagen digital puede conducir a una exposición innecesaria a la radiación.
- Las soluciones “temporales” o “alternativas” pueden negar las ventajas de seguridad de los sistemas de administración de medicamentos con código de barras.
- Los defectos en las redes de dispositivos médicos pueden llevar a una atención retardada o inapropiada.
- La lenta adopción de conectores de alimentación enteral más seguros deja a los pacientes en riesgo.
Traducción propia.