En casos raros, la administración intravenosa de anfotericina B (liposomal) puede causar hiperpotasemia grave, difícil de tratar, que surge durante o varias horas después del inicio de la infusión del medicamento. El Centro de Farmacovigilancia de los Países Bajos, Lareb, recibió 13 reportes de seguridad sobre esta reacción adversa grave, de los cuales 6 tuvieron un desenlace fatal a pesar del tratamiento del exceso de potasio. Cuatro de estos pacientes recibieron tratamiento con anfotericina B liposomal.
La anfotericina B intravenosa (liposomal) se usa en el tratamiento de infecciones fúngicas graves. Las fichas técnicas de anfotericina B convencional y anfotericina B liposomal incluyen a la hiperpotasemia como una reacción adversa al medicamento. El riesgo de hiperpotasemia se describe en asociación con la infusión intravenosa rápida, especialmente en pacientes con función renal disminuida.
En los reportes que recibió Lareb, en la mayoría de pacientes la función renal fue normal o eran sometidos a terapia de reemplazo renal. La anfotericina B se administró mediante infusión intravenosa lenta en la mayoría de los casos. La hiperpotasemia surge durante o varias horas después del inicio de la infusión intravenosa de anfotericina B, es grave y refractaria al tratamiento, en algunos casos con consecutivas arritmias cardíacas fatales. La hiperpotasemia aguda puede ocurrir con la primera administración intravenosa o dentro de varios días o semanas de tratamiento. Incluso en los casos con una duración de tratamiento más larga, la hiperpotasemia aguda aparece durante o varias horas después del inicio de la infusión intravenosa. La causalidad parece plausible considerando la relación temporal en ausencia de causas alternativas. El mecanismo subyacente aún no está claro, pero es independiente de la nefrotoxicidad o la infusión rápida. Sin embargo, en algunos reportes, los niveles de potasio aumentaron de forma más gradual y menos grave más adelante durante el tratamiento, con una disminución simultánea de la función renal y un curso leve.
Así también, los Centros de Farmacovigilancia en Europa recibieron un total de 76 reportes de seguridad sobre hiperpotasemia durante el tratamiento con anfotericina B intravenosa (liposomal), de los cuales 28 tuvieron un desenlace fatal. La monitorización de los niveles de potasio durante y en las primeras horas después de la perfusión podría ser útil para prevenir un desenlace fatal mediante una detección temprana. Se justifica una vigilancia adicional en caso de administración simultánea de suplementos de potasio.
El Centro de Farmacovigilancia Lareb ha compartido estos resultados con la Junta de Evaluación de Medicamentos de Países Bajos (Medicines Evaluation Board Agency Board), con lo que se iniciará un procedimiento europeo y se espera más acciones a finales de año.
Se invoca a los profesionales de la salud a continuar reportando cualquier reacción adversa relacionada con el uso de anfotericina B intravenosa (liposomal) y otros productos farmacéuticos al Sistema Peruano de Farmacovigilancia y Tecnovigilancia a través de eReporting (https://primaryreporting.who-umc.org/PE ) o al correo Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..