Los estimulantes son medicamentos que se requieren prescripción médica, y se utilizan para tratar el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), el trastorno de apetito desenfrenado y los episodios incontrolables de sueño profundo denominados narcolepsia. 

Estos estimulantes recetados, como el metilfenidato, dextroanfetamina y anfetamina/dextroanfetamina, pueden ayudar a disminuir la impulsividad y la hiperactividad, y aumentar la atención en pacientes con TD        AH; a reducir el número de episodios de sobre ingesta excesiva en pacientes con trastorno de apetito desenfrenado; y a promover la vigilia en pacientes con narcolepsia. Sin embargo, cuando no se utilizan adecuadamente tienen graves riesgos, como el uso indebido, el abuso, la adicción, la sobredosis y la muerte. 

La Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés) ha identificado que la información de prescripción (ficha técnica) actual de algunos estimulantes recetados no contiene advertencias actualizadas; por lo cual, está exigiendo que se actualice el Recuadro de Advertencia de la información de prescripción (label information) para describir los riesgos del mal uso, el abuso, la adicción y la sobredosis de manera consistente en todos los estimulantes recetados; así como, para aconsejar a los profesionales de la salud que vigilen de cerca a los pacientes para detectar signos y síntomas de uso indebido, abuso y adicción. También se está añadiendo la información de que los pacientes nunca deben compartir sus estimulantes recetados con nadie. 

La actualización de la información sobre estos riesgos con los estimulantes recetados está siendo requerida en varias secciones de la ficha técnica, incluyendo las secciones Advertencias y Precauciones, Abuso y Dependencia de Drogas, Sobredosificación y Consejos para el Paciente. Dentro de esta actualización comprende lo siguiente: 

• El estimulante recetado tiene un alto potencial de abuso y uso indebido, que puede causar el desarrollo de un trastorno por consumo de sustancias, incluida la adicción. El uso incorrecto y el abuso de estimulantes del SNC, puede provocar una sobredosis y la muerte, y este riesgo aumenta con dosis más altas o métodos de administración no aprobados, como la inhalación o inyección.
• Antes de prescribir un estimulante recetado, evalúe el riesgo de abuso, mal uso y adicción de cada paciente. Eduque a los pacientes y a sus familias sobre estos riesgos, el almacenamiento adecuado del medicamento (en un lugar seguro, preferiblemente cerrado con llave) y el desecho correcto de cualquier medicamento no utilizado. Instruya a los pacientes para que no compartan sus medicamentos. A lo largo del tratamiento, vuelva a evaluar el riesgo de abuso, uso indebido y adicción de cada paciente y vigile al paciente con frecuencia en cuanto a signos y síntomas de abuso, uso indebido y adicción.

Los signos y síntomas de abstinencia tras la interrupción brusca o la reducción de la dosis después de un uso prolongado de estimulantes del SNC, incluyen estado de ánimo disfórico; depresión; fatiga; sueños vívidos y desagradables; insomnio o hipersomnia; aumento del apetito; y retraso psicomotor o agitación.