Centro Nacional de Documentación e Información de Medicamentos

Más de la mitad compra medicamentos que deben adquirirse con receta médica

Por enfermedades respiratorias agudas, bronquitis, gastrointestinales y musculares

De acuerdo a un estudio realizado por la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid), el 43 por ciento de las personas que acuden a las farmacias de Lima se automedica, mientras que el 57 por ciento de este porcentaje lo hace de manera inadecuada al comprar medicamentos que requieren prescripción médica.

“Se ha encontrado automedicación en 43% de los usuarios finales y, de ese porcentaje, el 57% lo hizo con medicamentos que requieren prescripción médica. Es decir, se puede evidenciar que en muchas farmacias se suele expender libremente productos para cuya venta se necesita la presentación obligatoria de la receta”, indicó el director de la Digemid, Víctor Dongo Zegarra.

La automedicación se presenta generalmente en personas con enfermedades agudas, usualmente del tipo respiratorio, como bronquitis y faringitis, así como en quienes padecen males gástricos y musculares, para las cuales se utilizan antibióticos y antiinflamatorios no esteroideos, lo cual puede producir efectos y complicaciones no deseadas poniendo en peligro su salud, advirtió el experto.

“La automedicación es un comportamiento irresponsable. Cada medicina tiene una posología que incluye efectos adversos que pueden presentarse con consecuencias lamentables. Sólo el médico puede determinar la composición, frecuencia y horario del medicamento para el tratamiento óptimo de la persona enferma, evaluando antes el beneficio de este producto, versus los probables efectos desfavorables que se pueden presentar en el paciente”, anotó.

Asimismo, advirtió que la automedicación incrementa la resistencia antimicrobiana, incita la fármaco-dependencia, produce reacciones adversas prevenibles y retrasa el tratamiento de las enfermedades, lo que constituye un problema de salud pública.

Por ello Dongo Zegarra recomendó que en lugar de automedicarse, consultar a un médico quien, luego de evaluar sus casos, le prescribirá los medicamentos y las recomendaciones necesarias para su tratamiento, las cuales estarán contenidas en una receta.

Receta debe consignar DCI

Con relación a los medicamentos, explicó que el médico debe consignar de manera obligatoria en la receta la Denominación Común Internacional (DCI) y, opcionalmente, el nombre de marca.

El director de Digemid aclaró que la receta es personal, pues un medicamento que resulta útil para un paciente puede no serlo para otro. Asimismo, añadió que las dosis varían al tomar en cuenta la edad y condición física del paciente, si está o no embarazada en el caso de las mujeres, así como el peso y talla, además del funcionamiento de los órganos que es diferente en cada individuo, entre otros factores.

Recomendaciones

Dongo indicó también que toda persona que acude a una farmacia o botica a adquirir medicamentos debe revisar detenidamente la fecha de vencimiento, el estado de conservación y verificar que cuente con el respectivo número de registro sanitario. De no contar con esta información, debe abstenerse de adquirir el producto.

Recomendó además llevar sus recetas y adquirir sus medicamentos únicamente en farmacias y boticas registradas en el Ministerio de Salud y que cuenten con la presencia de un químico farmacéutico.

“Es importante además evitar lugares donde se comercializa medicinas de dudosa procedencia como mercadillos, ferias ocasionales o comprarlos a vendedores informales, ambulantes o charlatanes, pues sus productos pueden ser adulterados, reetiquetados, reciclados o falsificados, lo que pondría en peligro la salud de quienes los consuman.

Lima, 27 de marzo de 2010

NP. 0273-10